MOCHI: CONOCE SU HISTORIA

La historia de Mochi comienza con la búsqueda de una conejita por parte de su futura mamineja, para que Flan -su conejito- no estuviera tan solo. Fue así como encontró a Mochi, una pequeña y linda conejita de tan solo semanas, quien había sido rescatada y que en ese entonces vivía en un hogar temporal (HT).

Su ternura, timidez y manchitas que parecían maquillaje la cautivaron, no había duda que ella estaba destinada a formar parte de su familia junto a Flan.

Mochi llegó a su nuevo hogar con una mantita que le regaló su HT, la que conserva hasta el día de hoy. Lo más especial en todo este tiempo ha sido su crecimiento, como se ha ido acostumbrando cada vez más a las personas, ya que era muy tímida. Hoy le encanta recibir a invitados.

Le gustan los sabores dulces como el de la frutilla y la manzana, sus frutas favoritas. Además, le encanta jugar y saltar, y se porta tan bien que hasta sus remedios los toma sin problemas. Se relaja mucho al escuchar música con melodías suaves, y a veces le gusta ver caricaturas junto a su mamineja. Pero lo que más le fascina, por sobre todo, es compartir con su hermano Flan.

Algo que llama la atención en Mochi es que no pisa nada que no sea blandito o acolchado. Jamás pisa nada fuera de las mantas, no tolera todo lo que no es suavecito como ella y siempre está buscando lugares cómodos donde correr o simplemente acostarse.

Camila, su mamineja, nos cuenta: "la Mochi y el Flan son mis bebés, los amo demasiado, y de verdad los siento como mis hijos. Haberlos adoptado es de las mejores decisiones que he tomado y me alegran todos los días. Saber que están sanitos y felices, jugar con ellos, sus maneras de demostrar cariño, todo es muy boni."